Navidad, ¿dulce Navidad?
Como no podía ser de otra manera, en Meraki Salud también ha llegado la Navidad. Y con ella los alegres villancicos, los deliciosos turrones, las fraternales cenas de empresa, el precioso alumbrado, la armonía familiar... ¿qué? ¿No me iréis a decir que vuestras Navidades no son tan idílicas como las de las películas?
Si sois como el común de los mortales y no os habéis dejado arrastrar por la "felicidad forzosa" imperante en estas fechas es muy probable que los villancicos os lleguen a crispar, los turrones a indigestar, el alumbrado a provocar pseudo-ataques epilépticos y de las cenas de empresa y la familia...mejor no hablamos. Tranquil@s, no estáis sol@s. Os vamos a dar algunos consejos para que estas entrañables fiestas no acaben con nuestra paciencia y salud (física y mental).
- Problema: Tengo muchos compromisos que me obligan a estar todos los días quedando con unos y con otros.
- Solución: PRIORIZA! Piensa cuáles son las personas a las que puedes ver con más frecuencia y procura quedar en otro momento con ellas, no las querrás menos por posponer un vino. Lo entenderán perfectamente (es probable que estén en la misma situación).
- Problema: Como tanto que termino como una ballena varada y me encuentro mal.
- Solución: PLANEA! Si tienes opción de decidir los menús procura ajustar las cantidades de comida a las personas que vais a ser. No tengas miedo a que la gente quede con hambre, no estamos en la posguerra, eso ya no pasa. En caso de que no exista esa opción procura decantarte por los alimentos menos pesados y come despacio, comerás menos.
- Problema: Tengo miedo de arruinarme, pero también tengo miedo de quedar mal con la gente si no les gustan mis regalos (o decido no regalar).
- Solución: PIENSA! Vivimos en una sociedad consumista, pensamos que cuanto más gastemos más queremos y eso no es así. Lo más valioso que tienes es tu tiempo y las personas que te rodean van a agradecer que pases ese tiempo con ellas y no que gastes 300e que no te puedes permitir en su regalo. Válido también para los niños. Más regalos no implica hijos más felices; más tiempo para jugar con ellos, sí.
- Problema: Siempre acabo discutiendo o aguantando discusiones familiares.
- Solución: RESPIRA! Aquí no te voy a poner lo típico de que no saques temas peliagudos porque eso ya lo sabes. Te animo a que, antes de ir a la cena de Nochebuena o a la comida de Año Nuevo, reflexiones 5 minutos sobre las personas que estarán presentes. Seguro que las conoces perfectamente y sabes de antemano muchas de las actitudes o situaciones que pueden hacerte perder los papeles. Preséntate siendo consciente de a qué te enfrentas y sabiendo que si eliges estar ahí es porque hay algo que te compensa, que merece la pena. Cuando tu cuñad@ empiece a decir tonterías, respira, sonríe y coge otro langostino.
Esperamos que con todo esto os hayamos ayudado a llevar algo mejor esas situaciones que a veces se nos van de las manos en estas fechas y podáis tener así una...Nochebuena de amor, Navidad jubilosa, es el mensaje feliz de las muñecas...del equipo de Meraki Salud!!!
Psico+Fisio+Nutri